A tres voces Poema a Pere Salinas
Una vela y un faro
luz cambiante
ojo que nombra
lluvia que parte
todo habla de ti
desgarro y lirios.
En silencio
sugieres amarillos
que el faro
no puede.
Fernanda Martínez Gadea
07/02/14
Vela, faro, lluvia, voces, seres desgarrados, encerrados, un poema volcándose en sus ojos lastimados, silencios amarillos y un "faro que no puede".
ResponderEliminarFernanda, ¡cuántos frutos del alma!
Son esos silencios amarillos que duelen y de los cuales tan solo quedan registros en el alma, en algún lugar del cuerpo...Gracias por tus palabras, Dalmiro!
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